viernes, 8 de julio de 2011

Trato digno a los animales de compañía

Los perros y gatos callejeros ya cuentan con el apoyo de una Ley, y por ello en los centros antirrábicos del Distrito Federal, queda estrictamente prohibido el maltrato y muerte por electrocución de esos animales y desaparecen las llamadas "perreras", buscando con las modificaciones a la Ley de Salud local brindarle un trato digno a los animales de compañía. 

Al referirse a las reformas a la Ley de Salud del Distrito Federal, la presidenta de la Comisión de Salud de la Asamblea Legislativa, Maricela Contreras Julián, aseguró que a través de esas modificaciones se busca brindar un trato digno, respetuoso, de bienestar y calidad de vida a los animales de compañía, perros y gatos, eliminando cualquier tipo de maltrato.

Con esto, a la vez desaparecerán las llamadas "perreras" y serán convertidas en centros de atención canina, sitios que serán operados por la Secretaría de Salud de la ciudad de México y clínicas veterinarias delegacionales, lo que aseguró la legisladora que esto implica hacer cambios de funciones y formas de operar, eliminando las denominadas razzias de perros.

"Además de ofrecer servicios de medicina preventiva básica para perros y gatos en dichos espacios, se cambiará la idea de que se trata de lugares de muerte y de masacres de animales", y que con estas reformas se establecerá como único método de sacrificio el suministro de barbitúricos que deberá ser con previa sedación y no utilizar la electrocución de las animales que ingresan a dichos centros.

"Con ello, se llega a un sacrificio humanitario sólo cuando sea estrictamente necesario. Asimismo se plantea como eje de control de perros y gatos la promoción de la adopción y las campañas masivas gratuitas y de carácter permanente de esterilización como temas prioritarios, para evitar nacimientos de animales de los que nadie se hará cargo" y que luego deambulan por las calles de la ciudad.

Por otro lado, señaló que también el pleno de la ALDF estableció la obligación de proponer y aprobar el presupuesto necesario para la operación de los centros de atención canina y clínicas veterinarias delegacionales y el establecimiento de un sistema de pago único para evitar la discrecionalidad en el cobro de los servicios que se ofrecen, apuntó.

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